Una de las cuestiones más importantes sobre las finanzas personales son las deudas, o en un lenguaje más técnico los créditos a los que nos hemos hecho acreedores. Este asunto es interesante porque hay dos cuestiones que debemos considerar, el primero es que hay que saber cuándo contraer una deuda y hay que tener un plan para realizar el pago de este mismo crédito.

Lo primero que definiremos para poder entender este artículo es la deuda. Una deuda es una obligación que alguien contrae con la finalidad de pagar algún préstamo o activo, es decir una cosa. De esta manera podemos obtener créditos debido a compra de bienes o también es posible contraerla debido a un préstamo.

¿Necesito el préstamo? Una deuda muy importante

Una de las principales cuestiones a considerar en este caso es que las deudas por lo general incluyen una tasa de interés que tendrá que ser cubierta. Esta tasa de interés se maneja de distinta forma dependiendo de la institución que brinda el crédito o préstamo. Ahora que sabemos que es una deuda pasemos de lleno a analizar nuestra situación.

Lo primero que debemos considerar es ¿Cuándo contraer una deuda? Por lo general los préstamos se realizan para que nosotros podamos adquirir un bien que tiene un coste considerable, un ejemplo claro de esto son las hipotecas, en los que una institución financiera nos brinda el capital necesario para poder hacernos de un bien inmueble.

Hay una pregunta que nos ayudará mucho a saber si debemos contraer una deuda, incluida la responsabilidad de cubrir los intereses que este préstamo ocasione:

¿Qué pasa si no adquiero tal bien? Aquí las respuestas pueden variar mucho, pues en varias ocasiones es posible que los sentimientos intervengan para poder tomar la decisión. Es por ello considerar como respuestas válidas solo aquellas actividades que impliquen alguna repercusión considerable dentro de la vida diaria nuestra o de alguna persona cercana.

Seleccione el mejor tipo de préstamo para nuestra deuda

Una vez que nos hemos decidido por adquirir la responsabilidad de una deuda es importante considerar la tasa de interés. La razón de esto es que es esta tasa la que definirá el monto total que tendremos que cubrir para saldar nuestra deuda. Es imperante que preguntemos en la institución que nos ofrecerá el crédito el tipo de interés que se estará manejando. Existen dos tipos.

El primer tipo de interés es el interés simple o fijo, y se utiliza únicamente haciendo uso de dos datos, el monto de préstamo y la tasa de interés. La tasa de interés deberemos manejarla como un numero decimal, es decir que el 15% equivaldría a 0.15. Si nosotros multiplicamos la cantidad prestada por la tasa de interés nos dará el interés que tendremos que pagar por el crédito. De esta forma si pedimos prestados 100 euros a 15% de interés, además de los 100 euros deberemos pagar 100 x 0.15 = 15 euros. En total pagaríamos 115 euros, sin importar la cantidad de años que acordemos para realizar el pago.

Por otro lado tenemos el crédito variable, que en palabras simples se puede definir como interés que se ve afectado a las fluctuaciones del Euribor, la razón de esto es que la tasa de interés se va aplicando a la cantidad anual de la deuda.

Es por estas razones que debemos informarnos bien sobre el tipo de deuda que estamos contrayendo, para así poder controlar mejor las cantidades que vamos a tener que pagar.